Que extraño es Extrañar

Y subió lenta y cancinamente al bus. A ese Gigante que lo llevaría de nuevo a su tierra, a esa tierra que lo vio nacer, crecer y la cual espera lo vea morir. Y subió y se acomodó. Esta vez no le asignaron puesto al lado de la ventana, una nueva y pequeña muestra de que esta vez el viaje era diferente, era especial y porqué no Inolvidable.

Así, partió aquel Monstruo al que llaman Bus y cual flecha plateada corta el viento y se abre paso entre los demás vehículos a través de la basta, hermosa y paradisiaca Geografía Colombiana. Un viaje largo, pero que para él, esta vez se hizo eterno, interminable y a medida que el monstruo mecánico avanzaba, la distancia hacia que su viaje se alargara. Pero porqué? Por qué al estar más cerca de su destino, se sentía lejos?. La respuesta es simple, quería regresar al sitio de partida antes que llegar a su destino, el viaje de destino no le preocupaba, ya que mientras viajaba, no paró de pensar en su regreso y a medida que avanzaba el pensar en ello, hacia aún más interminable el viaje.

Jamás se había sentido así, jamás había partido con tanta nostalgia de un lugar, jamás había querido regresar tanto a otro sitio que no fuera su casa al lado de su familia y amigos. El largo viaje hizo que no meditara las razones del porqué de este sentir, del porque de estas ansias tan fuertes de regresar. Sólo pensaba y pensaba en el sitio del cual había partido, pensaba en lo bien que la había pasado, en las cortas experiencias que había vivido y compartido. En lo mágico que para él fue esta visita a ese sitio al cual quería regresar de inmediato.

Y llegó no más a su destino, a su hermosa tierra, a su paraíso personal, a su pedacito de cielo en medio de la cordillera de los andes.

Se bajó del Monstruo mecánico, le costó como jamás le había costado asimilar el hecho de saber que estaba de nuevo en su pueblo. Por lo general cada que esto sucedía, sonreía y se llenaba de alegría, esta vez fue diferente, está vez la sonrisa se cambio por una cara de preocupación, ocasionada por el hecho de aún estar pensando en cómo y cuándo regresar a aquel sitio que le había hecho sentir por primera vez lo extraño que es extrañar.

Llegó a su casa, si, todavía con su mente en aquel sitio. Desorientado en un lugar que conocía mejor que cualquier otra cosa. Pensativo y porque no, aburrido. Lleno de frustración de no tener el poder de invertir las cosas y hacer que todo jugara a su favor. Pidiéndole explicaciones al viento y a la soledad que para ese momento le acompañaba en su cuarto. Se preguntaba en medio de la música emitida por el silencio de su cuarto ¿Porqué tenía que pasar por algo así?, porqué no preparó su mente para algo así?, Porqué ahora el destino le complicaba la vida poniéndolo a vivir y pasar por situaciones tan frustrantes como esta? y por más que se preguntaba su mente no era capaz de darle una respuesta.

Decidió entonces dormir, pero ni en sus sueños fue capaz de dejar de pensar en aquel lugar, en lo vivido allí. Aunque sus sueños eran positivos respecto a la realidad. En su sueño se encontraba de nuevo en aquel lugar, en su sueño aquel lugar y el Paraíso en el cual nació estaban unidos por una montaña y no separados por una eternidad de Km's como lo estaba en realidad. En sus sueños volvía a disfrutar de aquellos momentos maravillosos, de aquellas personas y situaciones grandiosas con las cuales se encontró en aquel lugar. En su sueño podía llevar cuantas veces lo deseara a estas personas a su lugar de origen y enseñarles a ellos el Paraíso por el cual estaba rodeado. En su sueño no tenía que hacer viajes con la incertidumbre de regresar o no. En su sueño todo era perfecto, en su sueño vivía la realidad que tanto había deseado después de aquel viaje.

Fue un sueño largo, casi tan largo como su viaje de regreso de aquel lugar. Se despertó aturdido y aún más confundido. Dentro de su confusión tomo una decisión. Siendo el sueño que había acabado de tener la muestra intangible de la ilusión que tanto anhelaba alcanzar, decidió entonces volver a dormir. Esta vez para siempre....Sii!!!, para siempre. Decidió que no tenía sentido despertar a vivir una realidad que no deseaba, a vivir una incertidumbre que no se merecía a vivir una vida que para él no era vida.

Así pues, se quedó profundo, jamás volvió a despertar de aquel sueño que a la postre dejo de ser sueño para convertirse en realidad.

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